Críticas a la educación
administrador | 5 Agosto 2009 | 21:03No podemos olvidar la histórica marcha de los estudiantes, la Revolución Pingüina o los innumerables paros del Colegio de Profesores y funcionarios del Ministerio de Educación. Todo esto nos da cuenta de que la educación se encontraba en un punto crítico indiscutido.
Las circunstancias que han llevado a generar esta crisis son de diversa naturaleza, dichas con palabras simples para que la gente común entienda qué estamos analizando y pueda pensar y opinar. La cobertura se ha ampliado mucho, dado que ha irrumpido la educación como un nicho de negocio que poco se compara a la calidad con que esta se entrega.
Otro factor es aquel relacionado a la accesibilidad. Es conocido que en algunos sectores las personas no pueden tener acceso a la educación, dado el nivel de pobreza en que se encuentran. Esto hace que el potencial estudiante sea marginado y estigmatizado.
El deterioro del aprendizaje, donde se beneficia una práctica dependiente y memorizante, lo que incentiva a ser un estudiante con poca iniciativa y bajo nivel investigativo.
La inequidad en el sistema educativo está relacionada con que la misma oferta educativa homogénea se imparte para las poblaciones heterogéneas.
Otro de los aspectos es la decreciente asignación de recursos económicos, una administración centralizada, burocrática y aún con fuertes rasgos autoritarios además de una visión muy a corto plazo en las tomas de decisiones.
Críticamente puedo señalar que otro factor clave en este serio deterioro de la educación en Chile es la familia: los hogares -donde se asientan las bases de una educación informal- no están preparados. Me explico en el sentido más amplio. El respeto, la obediencia, la tolerancia, la responsabilidad, entre otros valores, ya no se entregan, porque están en extinción. Otro factor importante es el trato que se les da a lo hijos. Los padres, responsables de su educación, deberían darles más afecto, escuchar sus demandas y apoyarlos en la solución de sus problemas.
Es importante que demos la oportunidad de crear una educación más integradora y formadora. De eso depende que la juventud sea el divino tesoro que todos añoramos. Espero que las Corporaciones Municipales de Educación hagan un nuevo proyecto educativo, que compitan en calidad y se les de el premio que se merecen una distinción de todos los chilenos, el orgullo de ser educado en igualdad y con la herramienta del futuro.